Sobre mí


Si tuviera que contar la historia de Amaya Perucha la historia comenzaría en una casa llena de luz y campo. Ella era la niña que revoloteaba alrededor de grandes contadores de historias, exploradores , maestros , viajeros y soñadores. Siempre con los oídos abiertos escuchaba todo lo que decían, imaginaba los escenarios de los viajes que narraban, aprendía que siempre hay algo que aprender, que sólo hay que pegar la nariz para descubrir. 
Hablaba poco hacia fuera pero hacia dentro contaba, dibujaba y expresaba. Se fue convirtiendo en silencio en la soñadora de relatos que transcurrían en escenas que plasmaba con letras, dibujos y fotos...

Y me hice mayor. Hoy compagino mi trabajo en la docencia como profesora de Biología y Geología en un Instituto de Enseñanza Secundaria con la escritura para distintas edades y la creación de álbumes ilustrados.

Son mis grandes pasiones en las que vivo volcada: escribir y transmitir, de cualquier forma, la magia de las pequeñas cosas

Soy firme defensora del eterno asombro en todas sus facetas y reinvindico de la idea de que los cuentos no son sólo para niños.